Sharm el-Sheikh y la península del Sinaí

Y llegamos a la última parada de nuestra ruta por Egipto, la península del Sinaí. Normalmente no está dentro de la ruta típica por Egipto pero nosotros no queríamos marcharnos de este país sin visitar esta zona. Concretamente volamos desde El Cairo hasta Sharm El sheikh, una localidad a orillas del Mar Rojo, y ni que decir tiene que este mar es uno de los destinos más típicos para la práctica de snorkel y submarinismo del mundo. En la zona costera de Sharm el Sheikh hay gran oferta hotelera, algunos hoteles tienen hasta su propio parque acuático dentro, una auténtica pasada al más puro estilo Caribe.

No hay que olvidar que el Sinaí es una zona algo más convulsa que el resto del país, pero la zona turística de Sharm el Sheikh es segura y tiene checkpoint con militares y policías que controlan toda la zona. Los hoteles además, dan una pulsera a los clientes (aunque solo tengas el alojamiento) para tener controlado quién está alojado en la zona y quién no. Nosotros elegimos un hotel de la bahía de Naama una de las zonas preferidas por los turistas para alojarse.

Nosotros en total estuvimos dos días y una noche en la ciudad. El primer día lo dedicamos a disfrutar un poco de la playa, el paseo marítimo y el ambiente de la ciudad. También estuvimos en la cafetería más famosa de la zona, Farsha Café, ubicada en un acantilado. Es una auténtica pasada, con decoración vintage y zona de chill out muy recomendable especialmente al atardecer. Es muy frecuentada por turistas, no dejéis pasar la oportunidad si estáis por aquí de ir a este lugar tan pintoresco, además las bebidas y las comidas están muy buenas y a muy buen precio.

El segundo día hicimos una excursión al Monte Sinaí y el Monasterio de Santa Catalina. Como decimos, esta zona es más convulsa que el resto de Egipto, por lo que en todo momento, al salir de la zona turística no puedes conducir libremente y hay que ir escoltado por militares para realizar las excursiones. Nuestra excursión empezó a las 6 de la mañana y terminamos en torno a las 6 de la tarde, unas 12 horas. El sistema montañoso que ocupa el centro de la península es donde se encuentra el famoso monte Sinaí, el lugar donde según la Biblia, Moisés recibió las Tablas con los 10 mandamientos, una pasada!

A los pies de este monte se encuentra el monasterio de Santa Catalina, el monasterio más antiguo del mundo. También llamado el monasterio de la Transfiguración, está ubicado en el supuesto lugar donde según la Biblia Moisés se comunicó con Dios a través de la zarza ardiente. Se construyó en el año 565 y desde entonces está habitado por monjes. Este monasterio se considera sagrado por las 3 principales religiones monoteístas: cristianos, judíos y musulmanes. A pesar de la zona donde está ubicado este monasterio, nunca ha sido destruido por los musulmanes, puesto que Mahoma lo consideró un lugar sagrado y le otorgó su protección (escrito en el Corán) por lo que ha permanecido intacto al paso de los siglos.

El monasterio tiene una sólida muralla de 11 metros de alto y 2,5 metros de grosor por seguridad. En su interior se puede visitar la Basílica de la Transfiguración, y un museo con un gran patrimonio entre otros atractivos. Dentro de este museo se encuentra el documento escrito a mano por el mismo Mahoma donde le otorga la protección al monasterio. Cuenta con una colección de manuscritos y códices importantísimos (la más grande después de los archivos vaticanos). Además, se puede ver la zarza ardiente en la que según la Biblia, Moisés tuvo la aparición de Dios. Por todo ello, este monasterio es un importante lugar de peregrinación religiosa.

Este monasterio ha sufrido varias modificaciones a lo largo de sus quince siglos de existencia pero siempre respetando su autenticidad y su distribución original. A pesar de ubicarse en territorio hostil la zona está muy controlada por militares. El monasterio también ofrece alojamiento a los peregrinos que quieran hacer noche allí. Se encuentra a unas 3 horas por carretera de Sharm el Sheikh y a 2 y media de la ciudad de Dahab.

y después de visitar el monasterio y comer en un restaurante local en Dahab, pusimos rumbo de nuevo a Sharm el Sheik. Si quieres conocer que más actividades podéis hacer en la ciudad pincha aquí.

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