Qué ver en Brujas

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A continuación, os compartimos cuales son los lugares imprescindibles para aprovechar al máximo tu paso por esta preciosa ciudad belga:

1. Grote Markt

La Grote Markt es la plaza principal y el alma de Brujas. Rodeada de impresionantes edificios históricos, es el lugar donde late la vida de la ciudad. En el centro de la plaza se alza el majestuoso campanario Belfort, una torre medieval de 83 metros que ofrece vistas panorámicas espectaculares a quienes se animen a subir sus 366 escalones.

A su alrededor, casas gremiales coloridas y restaurantes con terrazas crean un ambiente animado y acogedor, ideal para sentarse a disfrutar de una cerveza belga o un plato típico mientras se contempla el ir y venir de turistas y locales.

Durante la temporada navideña, la Grote Markt se transforma en un mercado de invierno con pistas de hielo y luces que la convierten en un auténtico escenario de cuento. Visitar esta plaza es algo imprescindible para captar la esencia de Brujas, su historia y su vibrante vida cotidiana.

2. Campanario Belford

Ubicado en plena Grote Markt es uno de los símbolos más emblemáticos de la ciudad. Esta imponente torre medieval que domina la plaza ha sido durante siglos el vigía y campanario que marcaba el ritmo de la vida urbana.

Construido originalmente en el siglo XIII, el campanario Belfort ha sufrido varias remodelaciones a lo largo del tiempo, pero conserva su encanto gótico que lo hace irresistible para visitantes y fotógrafos. Su fama también viene de la colección de campanas del carrillón, que suenan regularmente y llenan la plaza con melodías tradicionales.

3. Ayuntamiento de Brujas

El Ayuntamiento de Brujas (Stadhuis) es uno de los edificios más antiguos y destacados de la ciudad, situado en la pintoresca Plaza Burg, justo al lado de la Grote Markt. Construido entre 1376 y 1420 su interior, impresiona por sus salones decorados con pinturas históricas que narran la historia de Brujas y sus tradiciones, además de muebles antiguos y una impresionante escalera de piedra. Es un reflejo del poder y la riqueza que la ciudad tuvo durante la Edad Media como importante centro comercial.

La plaza Burg, donde se ubica el Ayuntamiento, también alberga la Basílica de la Santa Sangre, haciendo de esta zona un punto histórico imprescindible durante vuestra visita a Brujas.

4. Basílica de la Santa Sangre

Es otro de los monumentos más emblemáticos y misteriosos de Brujas. Situada, como hemos dicho, en la plaza Burg, junto al Ayuntamiento, esta basílica alberga una reliquia única: un pequeño frasco que, según la tradición, contiene la sangre de Jesucristo, traída a Brujas tras la Segunda Cruzada. Que sea verdad o no eso ya es otro asunto, pero la Basílica merece mucho la pena y es muy curiosa.

El edificio combina dos estilos arquitectónicos: la parte inferior es una iglesia románica del siglo XII, mientras que la superior es una capilla gótica decorada con vitrales y frescos que representan escenas bíblicas. Su interior es íntimo y lleno de detalles artísticos que reflejan siglos de historia y devoción. Cada año, durante la procesión de la Santa Sangre, la reliquia es llevada en un desfile impresionante que atrae a miles de fieles y turistas.

5. Puente de Bonifacio

Es uno de los lugares más encantadores y fotogénicos de Brujas. Este pequeño puente de piedra, que cruza uno de los canales más pintorescos de la ciudad, conecta el barrio de Bonifacio con el centro histórico. Con su arco perfecto y los árboles que lo rodean reflejándose en el agua, el puente ofrece un escenario ideal para pasear tranquilamente, tomar fotos o simplemente disfrutar del ambiente apacible de los canales. Lo único malo es que suele estar bastante concurrido.

Al atardecer, el reflejo del puente y la luz dorada crean un paisaje casi mágico, muy apreciado tanto por locales como por visitantes.

6. Iglesia de Nuestra Señora de Brujas

Esta iglesia es una de las más impresionantes y visitadas de Brujas. Su característica fachada de ladrillo rojo destaca en el paisaje urbano, y su torre, con 122 metros de altura, es la segunda más alta de Bélgica, visible desde muchos puntos de la ciudad.

El interior de la iglesia alberga auténticas joyas artísticas, entre ellas la famosa escultura de “La Madonna con el Niño” de Miguel Ángel, una de las pocas obras del maestro renacentista que se encuentran fuera de Italia. Además, la iglesia tiene hermosos altares barrocos, vitrales y pinturas que reflejan siglos de historia religiosa y artística.

7. Beaterio

El Beaterio (Begijnhof) de Brujas es uno de los lugares más encantadores y tranquilos de la ciudad. Fundado en el siglo XIII, este conjunto de pequeñas casas blancas rodea un jardín interior y fue el hogar de las beguinas, mujeres religiosas que vivían en comunidad sin hacer votos monásticos.

Pasear por sus calles adoquinadas y sus patios llenos de flores es como retroceder en el tiempo, disfrutando de una atmósfera serena y casi mágica en pleno centro histórico. Además, el Beaterio alberga una pequeña iglesia y un museo que explica la historia y modo de vida de estas mujeres. Esta zona es ideal para los que buscáis un momento de calma y queréis conocer una parte más íntima y espiritual de Brujas. Nosotros nos quedamos fascinados con la historia de estas mujeres.

8. Parque Minnewater

Justo al lado del Beaterio nos encontramos con este precioso parque con un lago. Este lago de leyendas y romanticismo también se le conoce como el “Lago del Amor” y es uno de los espacios más románticos y bonitos de Brujas. Situado al sur del centro histórico, este parque rodea un lago tranquilo cuyas aguas reflejan los antiguos puentes y árboles que lo rodean, creando un paisaje perfecto para un paseo inolvidable.

El nombre “Minnewater” proviene de la palabra alemana “Minne”, que significa amor, y está ligado a una leyenda local sobre amantes trágicos, lo que le añade un aura mágica al lugar. Alrededor del lago encontrarás áreas verdes, patos y cisnes que le dan vida a este oasis natural. Si vais a visitar el Beaterio no os olvidéis de pasar por aquí.

9. Catedral de San Salvador

La Catedral de San Salvador (Sint-Salvatorskathedraal) es la iglesia principal de Brujas y también la más antigua, con orígenes que se remontan al siglo X. Aunque su aspecto actual combina varios estilos debido a remodelaciones a lo largo de los siglos, predomina el estilo gótico.

Está ubicada en el centro histórico y destaca por su sobriedad y elegancia interior, con un hermoso altar mayor, capillas laterales y un coro renacentista. Además, alberga obras de arte significativas, como pinturas flamencas y esculturas religiosas que reflejan la rica tradición artística de la región.

A diferencia de otras iglesias más turísticas, la Catedral de San Salvador ofrece una atmósfera más tranquila y auténtica, ideal para admirar el patrimonio religioso de Brujas en calma.

10. Canales de Brujas

Los canales de Brujas son, sin duda, uno de los mayores encantos de la ciudad y la razón por la que muchos la llaman la “Venecia del Norte”. Esta red de vías fluviales serpentea por todo el casco histórico, bordeando casas medievales, puentes encantadores y jardines ocultos.

Pasear a orillas de estos canales o recorrerlos en barco es una de las experiencias más mágicas que ofrece Brujas. Desde el agua, la ciudad muestra su rostro más romántico y pintoresco, con reflejos perfectos y vistas que parecen sacadas de un cuento. Además las tiendas y chocolaterías harán que vuestro paseo por la ciudad se vuelva inolvidable!

Además de su belleza, los canales fueron vitales en la Edad Media para el comercio y defensa de la ciudad, y hoy en día siguen siendo un símbolo de la identidad y el patrimonio de Brujas.

Hay algo que muchos visitantes no dejan de hacer en Brujas y es dar un paseo en barco. Una forma peculiar y tranquila de recorrer la ciudad y sus canales. Si os apetece reservar un paseo en barco por Brujas podéis hacerlo 🛶 aquí.

Otros lugares que visitar en Brujas:

Museo Groeninge: Este museo alberga una excelente colección de pintura flamenca y belga, con obras maestras de artistas como Jan van Eyck y Hieronymus Bosch. Es ideal para los amantes del arte y la historia.
Molinos de viento de Kruisvest: Situados en las afueras del casco histórico, estos antiguos molinos ofrecen una vista diferente de Brujas y son perfectos para una caminata fuera del bullicio turístico.
Begijnhof Museum: Aunque hablamos del Beaterio, este museo dentro del complejo ofrece una mirada profunda a la vida de las beguinas y la historia religiosa de la ciudad.
La Lonja de los Paños: Un edificio histórico que fue el centro del comercio textil en la Edad Media, muestra la importancia económica que tuvo Brujas en esa época y ofrece una arquitectura impresionante.

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